Hacemos un experimento colorido y muy fácil para el que sólo necesitamos rotuladores que no pintan, papel de cocina, agua y recipientes. Además de hacer ciencia vamos a aprender los colores primarios y secundarios.
- Primero tintamos el agua con los rotuladores quitándole la barra interior y echándola en agua.
En pequeños recipientes colocamos el agua coloreada de la siguiente forma. Rojo, vacío, azul, vacio, amarillo, vacío y rojo.
Unimos los recipientes con papel de cocina y pronto se produce la magia.
¡Qué maravilla! como por arte de magia aparecen los colores secundarios.
Gracias por ayudarme a compartir y recuerda que la paciencia es la madre de la ciencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario